Huracán empató sin goles, sigue sin ganar, jugó muy mal, su arquero fue figura, nunca encontró el juego y entró en zona de descenso. Números espantosos: 9 puntos logrados sobre 39 jugados.
Ya a los 28 segundos, Temperley tuvo su primera llegada. Y al minuto, la segunda. Osea, en 60 segundos, el Celeste ya nos ganaba dos a cero en el ping-pong famoso de la tele.
Sólo en 10 minutos de todo el partido, Huracán hizo pie. Perdió por las bandas, no recuperó en el medio, no asustó arriba y sólo una vez pudieron habilitar a Ábila que no definió bien en su única pero muy clara chance de gol. Otra vez, Díaz fue Marcos y sacó todo lo que le tiraron. Tuvo dos tapadas sensacionales, descolgó una tonelada de centros y se mostró seguro cada vez que lo probaron. MUY BIEN 10 para nuestro arquero.
Tuvo 15 días para trabajar el entrenador. Para ensamblar al equipo. Sabía que no iba a contar ni con Espinoza (titular) ni con Gamarra (suplente y sin ser prioridad en los cambios). Según Apuzzo, el amistoso contra Brown de Adrogué fue positivo. Hasta agregó que Montenegro había levantado su nivel. Nada de eso se plasmó: nunca hubo juego asociado, todo era pelotazo y a tratar de beneficiarse ante una rebote de sugunda jugada o algún desborde salvador, todos mostraron un ritmo cansino y el Rolfi ni siquiera entró en juego. Toranzo sigue siendo un pasador que aparece una o dos veces. Nada más.
Tampoco entiendo qué trabajan en lo físico. A los 20 minutos del complemento, ya le costaba volver a varios jugadores. Es muy pobre el laburo de los profes. Y me pregunto, ¿algún dirigente va entre semana a observar los entrenamientos? No lo creo.
Además, pidieron un central y un punta. HACE DOS AÑOS QUE HURACÁN NO TIENE DOS VOLANTES POR AFUERA. Uno zurdo y otro derecho.
Todo es desconcierto en el club. No hay un proyecto en Primera, se improvisa en Reserva y en inferiores se juega a no perder. Tampoco se mejoraron las canchas donde practican, los materiales siguen siendo acotados y en mal estado. Eso sí: llegó la ropa después de tantos reclamos.
El fútbol no tiene un hilo conductor. No se sabe a qué se juega ni dentro ni fuera de la cancha. Para los que son fanáticos y sólo les preocupa la pelota en el club, me imagino que deben estar más que preocupados. Para colmo, cada vez que peleamos el descenso no nos fue bien. Hay y no hay tiempo. Si no se empieza a trabajar en la semana dirigencialmente, los resultados seguirán siendo pobres con excepciones típicas del juego. Nos tenemos que dar cuenta de una buena vez que para ser serios en una cancha tenemos que ser serios institucionalmente. Que todo debe estar en orden y en el club NI EL FÚTBOL PROFESIONAL LO ESTÁ.
La próxima, el martes, por Copa Argentina. Duelo difícil. Ganen y usen esa plata para el club. Empecemos a exigir mejoras. A Huracán lo hacen sus políticos y sus socios.
Juan Manuel Penalba
@JuanchoPenalba
